Una cara tersa, firme, luminosa y con suavidad son indicios de una piel saludable. ¿Pero como se logra esto? Quédate y te contamos el secreto. Para tener una piel sana debemos encontrar el equilibrio desde la epidermis (capa más profunda de la piel). Este balance se empieza a regular con hábitos saludables, disciplina y protección externa, como una rutina de skincare. 

Y aunque muchos lo sabemos, pocos lo entendemos, el agua es vital para desarrollar gran parte de las funciones de los órganos de nuestro cuerpo. Tan solo basta decir que el cerebro se compone en un 70% de agua, la sangre en un 80% y los pulmones en un 90% si esto no funciona bien, lo demás puede verse afectado. Solo podemos deducir dos cosas, la primera, es para confirmar la premisa del párrafo anterior “cuidar desde adentro para reflejar por fuera”, la segunda, es que debemos tomar agua…

¿Será lo mismo hidratar que humectar? 

Empecemos por reconocer la diferencia entre una piel hidratada y humectada ¿Por qué debería saberlo? Esta acción parte del autocuidado y el amor propio por entender las necesidades de nuestro cuerpo. 

• Hidratar: Aportar agua a la piel para mejorar su capacidad de absorber humedad y nutrientes. 

• Humectar: Atrapa y retiene la humedad para construir la barrera protectora natural que evita cualquier pérdida de agua. 

Y si bien los dos gestos “hidratar y humectar” son vitales para proporcionarle a la piel la nutrición necesaria, conocer la diferencia entre ambos te permitirá seleccionar los productos adecuados a la hora de comprar cosméticos.  

Tips con amor para una buena hidratación corporal 

Más infusiones y menos bebidas azucaradas 

Si no eres amante del agua, puedes intentar con infusiones naturales, aportarán vitaminas, mayor energía y tendrá un sabor dulcesito. Te recomiendo el té verde, el té blanco, la manzanilla, la lavanda, el romero y el tomillo. 

Usa jabones naturales y suaves

No maltrates tu piel con jabones agresivos que prometen milagros o exfoliantes rústicos. Opta por un jabón neutro o natural. Después de cada baño emplea una crema hultrahidratante. 

No te expongas de forma directa al sol 

El sol emite rayos ultravioleta que maltratan de forma directa la piel, causando manchas y envejecimiento prematuro. Emplea protector solar todos los días y consume bebidas sin azúcar para reponer los líquidos que pierdes mediante la sudoración.